Durante la gestión de Mauricio Macri se firmó un acuerdo por 1.314 millones de pesos para mejorar rutas nacionales, pero las obras no se realizaron y el dinero desapareció.

Entre 2017 y 2019, durante la gestión de Mauricio Macri, la Agencia Nacional de Seguridad Vial giró a Vialidad un monto de 1.314 millones de pesos destinados a la seguridad de las rutas. Sin embargo, las obras nunca se realizaron y el dinero nunca apareció.

La sospecha central recae sobre Javier Iguacel, entonces director de Vialidad, quien meses después se lanzó como candidato a intendente de Capitán Sarmiento. Según denunció el diputado Rodolfo Tailhade, su campaña habría sido financiada con fondos desviados del Estado.

El faltante se descubrió mediante un informe de Seguridad Vial (gestión anterior), que confirmó que ninguna de las obras previstas en las rutas nacionales 5, 7, 8, 22 y 34 se llevaron a cabo. Además, indicaron que las pocas intervenciones realizadas están mal ejecutadas.

Además de la acusación contra Iguacel, las miradas también apuntan al exministro de Transporte, Guillermo Dietrich, quien autorizó los giros de dinero desde Seguridad Vial hacia Vialidad.

El diputado Rodolfo Tailhade denunció formalmente a Javier Iguacel y a Guillermo Dietrich, luego de que el informe confirmara el desvío de fondos. La causa en manos del juez Julián Ercolini y el fiscal Gerardo Pollicita, parece estar estancada.

La situación es grave, pero a los involucrados parece no preocuparles demasiado la causa que investiga el destino de un dinero que hoy equivale a 50.000 millones de pesos. Dietrich se alejó de la política y pasa sus días en Punta del Este. Por su parte, Iguacel se convirtió en empresario petrolero luego de quedarse con activos de YPF por una cifra mínima.